jueves, 27 de septiembre de 2012

¿Eres especial?

Al entrar en el portal una gota de agua le cayó en la nariz, miró hacia el techo y descubrió una enorme gotera. Ella meneó la cabeza, esquivó el charco del suelo, sacó una llavecita y abrió su buzón como hacía rutinariamente cada tarde después de venir de trabajar. Igual que cualquier lunes, una buena remesa de cartas se acumulaba desordenadamente en el interior del casillero. Repasó con rapidez la correspondencia: bancos, facturas, publicidad, más facturas, más publicidad, ... ninguna postal desde Isla Mauricio o Las Vegas, en su cara se dibujaba una irónica mueca.
"Un momento". De entre el fajo descubrió una carta con su nombre manuscrito; la dio la vuelta para ver quien la remitía pero no había rastro. Desde hace mucho tiempo no esperaba nada de nadie. "¿Quién?" Tiró de recuerdos escondidos en décadas gloriosas y pensó en Este o Aquel, quizá un ex con ganas de recuperar contacto o "puede que alguien al que le dije No" y vuelve a intentarlo nostálgicamente años después. "¿Y por qué no un admirador anónimo? Esas cosas a veces pasan". Nervios infantiles en forma de temblores afloraron en la mano que sujetaba aquel sobre.
Se sorprendió subiendo las escaleras de tres en tres hacia su piso y cuando llegó a su puerta no atinó a meter a la primera la llave en la cerradura. 180 latidos por minuto, su corazón batió un record personal. Nuevo intento y esta vez sí; abrió atropelladamente la puerta y tiró su abrigo, el maletín del pc y toda la correspondencia en la primera silla que encontró a su paso. Solo se quedó con aquella carta, la carta. La agarró con las dos manos y estudió la cuidada, casi primorosa letra con la que estaban escritos su nombre y dirección, "debe ser alguien especial". Intentó calmarse respirando hondo y mientras abría el sobre pensó que hacía siglos que nadie le escribía de su puño y letra, y eso era algo realmente extraordinario.


Estimada Maite. Te informo de que esta tarde a las 18:30 h. en 1ª convocatoria y 19:00 h. en 2ª, tendrá lugar una Junta Extraordinaria de la comunidad de propietarios. El asunto a tratar es la reparación de la gotera del portal. Ruego tu presencia y si no vas a asistir puedes delegar tu voto en otra persona autorizándola con el cupón adjunto. Disculpa la premura del aviso pero esto urge arreglarlo ya. Recibe un saludo afectuoso de tu Presidente.

lunes, 24 de septiembre de 2012

Todo llega

Un día, el hombre se sentó frente a la maceta que recién había plantado con una pequeña semilla y que había regado con la regadera de latón que guardaba en el armario de las cosas. El hombre decidió que hasta que no viera salir un brote de esa tierra negra, húmeda y de olor fecundo, no dejaría de mirar ni se levantaría del suelo; él era una persona metódica y necesitaba comprobar que todo lo había hecho bien.
Calculó que la cosa era cuestión de unos pocos días y se preparó con todo lo necesario para aguantar en la posición. Acumuló comida a su alrededor, preparó ropa de abrigo para las noches, se surtió del suficiente agua para regar tanto la maceta como su propio gaznate y no se olvidó de meter en una nevera de esas portátiles varias bolsas de hielos y una botella de champán: el brote debía culminar con un mererecido brindis.
Los días se sucedían y el paso del tiempo se hacía evidente en las barbas cada vez más luengas del hombre. Las ojeras ocupaban más y más superficie en su desgastado rostro, el ánimo flaqueaba y aunque el agua estaba empezando a escasear él decidió mantener la posición, firme, seguro del feliz acontecimiento. "Tiene que aparecer, tiene brotar".


Un extraño olor alertó a toda la comunidad. La llamada de un vecino puso a la policía sobre aviso. Nadie contestaba al timbre así que derribaron la puerta. El hombre ni siquiera volvió la cabeza; su única reacción fue poner el dedo índice en los labios mientras miraba fijamente a un tiesto que solo contenía tierra.

martes, 18 de septiembre de 2012

Los otros

Son las 5 menos cuarto de la madrugada, sigo despierto y para lo que queda ya no dormiré nada. Visto así ¿es tarde o es pronto? Siempre me lo he preguntado cuando tengo una de esas noches insomnes y me encuentro a medio camino entre el momento en que me acosté y el amanecer, que es cuando suelo despertarme.
Vuelvo a repasar lo que haré cuando me baje de la cama y plante los dos pies en el suelo, un acto que desde hace años se convirtió en ritual cuando no me quedó claro si era bueno o malo levantarse con el pie izquierdo o el derecho.
Dicen que levantarse con el pie izquierdo se supone que da mala suerte pero creo que eso es un punto de vista diestro, de aquella gente que ve y ha diseñado el mundo con la derecha. Una insidia en toda regla porque ¿qué pasa con los zurdos? ¿qué opinarían ellos? ¿acaso son desafortunados por nacimiento? No lo creo, pero para su desgracia prácticamente todo está diseñado para ser usado con (y por) la derecha, así que esa gente que usa un hemisferio contrario al de la mayoría a veces se encuentra ignorada, desplazada e incluso, en épocas pretéritas, reconvertida para usar la diestra.
Y ¿por qué todo lo bueno, lo recto o lo directo es lo derecho? ¿Acaso tu madre, al verte comiendo encorvado te decía "ponte izquierdo"? ¿es el conjunto de leyes el Izquierdo? ¿estás agotado y te vas izquierdo a la cama? ¿el wc en un bar está al fondo a la izquierda? No. Hay un totalitarismo de la derecha, valga la redundancia.
En esta época supongo que aún queda pendiente una revolución zurda, la revuelta de esa minoría silenciosa que está entre nosotros y sufren la tiranía diestra. La otredad en la que el totalitarismo de estribor nunca piensa y siempre obvia.

Así que amigos zurdos, siniestros todos, vuestro momento ha llegado. Ahora que todo el mundo reclama por sus derechos ya es hora de que vosotros -¡oh, pueblo de babor!- exijáis la defensa de vuestros izquierdos.


Las 5 de la mañana... ¿por qué el Norte es arriba? ¿y por qué no es abajo? ¿quién lo decidió?

jueves, 13 de septiembre de 2012

Luces y sombras

Atención, escucha, baja la voz. Para ya con esa verborrea que parece un atasco de palabras sin sentido y que atraviesa el aire en vaivén. Deja paso al silencio, regálame un poco de quietud, permíteme que disfrute del sonido de la nada. Necesito un rato sin distorsiones, calma para mis oídos, paz para mi alma, un momento para sentirme el único ser humano de la Tierra.

El viento sopla levemente en forma de brisa vespertina desordenando aún más tu flequillo. Los últimos rayos de sol se resisten a dejar de iluminar tu cara y, aunque te he visto así miles de veces, esta es de esas ocasiones en las que si pudiera pararía el tiempo para poder vivir ese instante en pausa como si estuviera dentro de una fotografía.

Creo que ya he estado aquí. Esto me suena ¿a ti no? Lo recuerdo así como en una nebulosa; ya sabes que la memoria no es mi fuerte pero estoy seguro de no equivocarme. Conozco este lugar, reconozco el olor, ese inconfundible aroma a deseo en el que tú y yo nos encontrábamos de vez en cuando. Sí, ahora recuerdo más nitidamente. Yo he pasado por aquí muchas veces y tú venías siempre conmigo.


- Voy bien por este camino, ¿verdad?
- Solo si no te importa llegar dando un rodeo.



martes, 11 de septiembre de 2012

Insisto

La moral no está por los suelos. No, eso sería demasiado optimista porque cree que está aún más abajo, como en el sótano 5 o así. Otra vez se encuentra abatido, de nuevo los acontecimientos se precipitaron y nada salió como esperaba. Una ocasión más en que los planes que él diseñaba no seguían la teoría que Hannibal Smith, allá por los 80 del siglo pasado, enunció.
Ni siquiera esta vez su proverbial determinación a levantarse de nuevo cada vez que cae, su habitual perseverancia rayana en cabezonería, le salva de sentirse la penúltima mierda. Es más, ya piensa que aún puede caer más bajo, de ahí que acepte que no ha tocado fondo y que todavía hay margen para algo peor. Será en ese momento en que ya considere que ha alcanzado el lugar de honor, el sitio donde uno se siente completamente derrotado.
Por un instante se le ilumina la cara. Piensa que, quizá, cuando llegue a ese lugar fatal por fin podrá descansar de tanta lucha sin ningún resultado, de tanta magulladura emocional provocada por estrellarse una y otra vez contra el mismo muro. Estará donde no quería estar pero al menos estará en algún lugar, y no en esa horrible tierra de nadie donde todo es un quizá y nada es seguro. Y eso ¡qué coño! también es una victoria.


 La moral está bajo suelo. Pero vuelve a pensar que la próxima vez, esta sí, por fin ganará.

martes, 4 de septiembre de 2012

La letra la ponía Hal

Y la música Burt.
Sí, me refiero a ese mítico tándem de la cultura Pop que eran Hal David y Burt Bacharach y que tantos buenos temas nos han regalado en las últimas décadas. Pero ya no más, porque el gran Hal acaba de morir y ha dejado definitivamente sin pareja al gran Burt. Ha sido una larga y emocionante vida de 91 años que dio lo suficiente de sí como para escribir algunos de los más grandes himnos Pop de la historia, y que ha hecho del dúo David/Bacharach referencia indispensable en la cultura musical contemporánea.
Grandes de la música como Dusty Springfield, Elvis Costello, Gene Pietny, B.J. Thomas, Tom Jones, Diana Ross, Nina Simone, Isaac Hayes, Aretha Franklyn y multitud más disfrutaron interpretando joyas escritas por Hal y Burt. Porque aunque no nos diéramos cuenta -como con Leiber y Stoller, por ejemplo- ambos estaban detrás de muchas de las letras y melodías que en algún momento hemos tarareado bajo la ducha, silbado levemente al oído de la persona que amábamos o canturreado en un momento de atasco. Canciones en las que la sensibilidad, el lado positivo de las cosas, lo bueno de vivir o el amor explotan en cada estrofa siempre desde un tono elegante y delicado pero nunca ñoño.
Puro talento, puro Pop.



Estoy de acuerdo con Dionne Warwick, una de tantos intérpretes de las canciones de Hal David: aunque no éramos parientes es como si alguien de nuestra familia se hubiera ido.